Una melodía para el corazón. (O. Sachiko x F. Yumi)
Hola a todos. n.n
Gracias por sus comentarios, me animan a seguir cumpliendo la actualización de una vez a la semana.
Tal vez los capítulos no sean muy largos pero es lo que hay. Nunca he escrito mas de once paginas y por lo general escribo cinco o siete paginas y no es porque las cuente solo salen así >.<
Esta historia se centra solo en el punto de vista de Yumi. Ella comienza la historia y terminara con ella. Pero creo que pensare en esa opción. Me gusta darles el gusto, no en todo pero esto me parece interesante. Haber cual es la perspectiva de nuestra querida Sachiko.
Pero he estado pensado en hacer unos pequeños especiales, historias dentro de la misma historia pero no se si quedara bien pues seria muy cortas y estas podrían ser narradas por otros personajes. Así que tal vez esta semana tengan un especial o tal vez no, depende.
Nos vemos la próxima semana. Que tengan una provechosa semana.
n.n
Capitulo 6
Rosas
amarillas.
El olor a de
desinfectante y de sangre se había esfumado. El ruido de los buses y de los
bocinazos incesantes se había perdido en las atascadas calles de Manhattan.
Camine directo al sofá más cercano y estrelle mi cuerpo contra
él mientras escuchaba la infantil discusión que se había armado en la sala.
Sus labios se movían rápidamente ante mi atenta mirada para
después mirar como mi colega movía las manos tratando de calmar a la “Loca”
mujer que teníamos en frente para después señalarme con la paleta de caramelo
que me había regalado el doctor, la cual mande a “volar” y Noriko recogió cuando
vi la enorme jeringa que me iban a poner.
-Yumi, dile que fue una negligencia por parte de tu jefa el
no haberte llevado al Hospital ayer mismo- Ordeno dirigiéndome una mirada
asesina.
-Eh… pues… yo… cre
-Ya te dije que Ogasawara-sama no estaba, en todo caso un
medico sumamente importante fue quien la examino- Dijo interrumpiendo mi
balbuceo- Y nos dijo que no era nada grave.
-¡Hay por Dios! Me vale un pepino si la visito el Papa,
Barack Obama o la misma reina Isabel.
Escuchaste lo que dijo el médico, ¡pudo haberse quebrado una
vértebra!
-Yo creo que estas exagerando un poquito, Yoshino-chan-
solté con dulzura para tranquilizarla cosa que resulto un poco, dando como
resultado que se sentara en el otro extremo de la sala.
- Pero Yumi…- Dijo con un pequeño puchero- Me tuviste
preocupada toda la noche.
Así que eso era…- Me
dije internamente.
-Como ves no ha sido grave, pudo serlo pero no lo fue. Lo
que me duele ahora es otra parte del cuerpo- Dije recordando el pinchazo.
-No pensé que fuera una miedosa, Fukuzawa-san- Dijo Noriko
riéndose.
-Y eso que no la has visto dado saltitos de miedo cada vez
que vemos una película de terror. Dijo riéndose con ganas.
-Gracias por el apoyo- Dije sarcásticamente.
-¿Trabajas en el mismo departamento que Yumi?
-No, más bien soy la secretaria de la señorita Sachiko-sama.
-Ni me la nombres…- Noriko en lugar de contradecirla
nuevamente, sonrió.
-Yoshino… Ella cuido de mí
toda la noche- Dije sintiendo como mis mejillas
se llenaban de calor- Ella al enterarse
de mi accidente de inmediato saco una consulta con el traumatólogo más famoso
de New York.
-Está bien… - Dijo resignada- Le prometí a tu papá que te cuidaría por eso
algunas veces me comporto así, discúlpame.
- Mi papá algunas veces
se olvida que tenemos la misma edad. Yo agradezco lo mucho que te preocupas por
mi por eso te digo la verdad cuando algo me afecta y créeme que lo que paso
ayer esta fuera de eso- Dije soltando sin querer demasiada información, que por
la mirada de Yoshino había también captado.
-Yumi-san, voy
retirándome. Tengo que regresar a la empresa- Dijo acomodando su bolso. Mañana
puede comenzar sus labores.
-Gracias- Le sonreí- por
cierto, ¿Puede llevarle mis exámenes a Matsudaira-san?
-Claro, no hay ningún
problema- Tomo mis exámenes médicos, los guardo y con una leve reverencia, se
marcho.
-Que chica más rara…-
Dijo Yoshino caminando hacia la su bolso-
-Noriko san es muy
agradable- Dije sacándome los zapatos que me estaban matando.
-No digo que no lo sea
pero tiene un no sé qué, que me repele.
-Jajajaja tal vez el
hecho que defienda a Ogasawara-sama sea lo que te fastidie- Dije obviamente.
-Tal vez… Por cierto,
toma no vas a creer lo que sale aquí- Dijo dándome la revista de economía mundial.
-No tengo cabeza para los
números ahora, dije arrojándola a la mesa
-Créeme deberías echarle
un ojo- Dijo alzando los hombros y sentándose en el sofá de al frente-Yumi hay
algo que quiero contarte… algo por lo que te estuve llamando toda la noche.
Al escuchar esas últimas
palabras mi rostro se alzo hasta toparse con su cara. Su mirada estaba triste y
cristalina. Entendí que estaba sufriendo pues sus dedos apretaban con fuerza el
dobladillo de su camisa. Como me dolía ver a mi amiga de esta manera. ¿Sera que
no fue buena idea haber venido a América? Si bien era verdad que desde que
había visto a Rosa Chinensis no había vuelto a tener pesadillas, las repentinas
llamadas a mi teléfono convencional, me tenían preocupada. Descolgaba la
llamada y una agitada respiración se escuchaba y colgaba. No se lo había contado a Yoshino para no
preocuparla.
-¿Paso algo en tu
trabajo?- Dije sorteando una opción que sabía que no era la correcta. Quería
que ella me lo dijera.
-Bueno fuera… Sería muy
sencillo solucionarlo.
-Ni estando triste dejas
el ego a un lado- Dije sonriendo tristemente-
-Soy una mujer única y
soy la mejor abogada del buffet de abogados para el que trabajo.
-Por eso estoy muy
orgullosa de ti.
-Rei…- Dijo en voz baja y
fue lo suficiente claro para saber que de ella se trataba.
-Lo sabía.
-Lo sé siempre, te vas por
las ramas para que no me duela el golpe- Dijo gimoteando al salírsele unas
cuantas lagrimas y yo rápidamente viendo la vulnerabilidad de mi amiga, corrí a
su lado y la abrace.
- Yumi, Rei-chan esta de
novia con un profesor que imparte Matemáticas en el mismo colegio… ¡Con un hombre
Yumi!
-Yo, ya lo
sospechaba-Dijo con rabia- ¿Cómo puedo competir contra eso? Si fuera una mujer
podría pero no así.
-Todavía no puedo salir del estupor…
-Ella es hermosa,
inteligente, tierna, femenina en su manera de ser a pesar de cómo se vista.
Quien no la miraría… Fui una tonta por no haberme lanzado a conquistarla antes-
Dijo escondiendo su rostro en mi cuello.
- Lo lamento tanto,
Yoshino. ¿Cómo te enteraste?
-De la peor forma, amiga.
Cuando entre a la casa se estaba besando con un moreno muy apuesto y me lo
presento como su pareja y este la miraba embobado… como yo la miro- Dijo
quebrándose de nuevo.
- Pero si estaba segura
que Rei-san te amaba.
-Tal vez confundimos las
cosas. Por eso te llamaba anoche. Quería que me reconfortaras…
-Discúlpame tanto,
Yoshino- Dije acariciando su espalda mientras resguardaba su rostro en mi
pecho.
-No tienes porque
disculparte, casi te pasa algo grave. Aunque no creas lo que te paso me hiso
olvidar todo y salir corriendo a tu
búsqueda- Yo sonreí por la buena amiga que tenia a mi lado- Yumi no es por nada
pero hueles delicioso, nunca había olido esta fragancia en ti- Dijo aspirando
esta vez fuertemente haciéndome cosquillas-
-Es de Sachiko-sama
-Wow, hasta te presto su
perfume- insinuó pícaramente.
-En verdad estoy
utilizando su ropa, este es uno de sus trajes- Dije tratando de sonar casual,
ella solo me recorrió con su mirada, abrió la boca y sonrió juguetona.
-¿Hay algo que me estés
ocultando?
-No…
-Mmmm, yo creo que anoche
ni siquiera te dolió la caída, debiste haber estar idiotizada observando a tu ¡Sachiko sama!- Dijo lo ultimo tratando
de imitar mi voz- Jajajaja
- ¡Yoshino!
-Al menos una de las dos
está feliz- Dijo de nuevo rompiendo a llorar- No puedo… simplemente no puedo
controlar mis emociones. Esta vez la máscara se parte en miles de fragmentos. ¡No
puedo ahora sostenerte, ni sostenerme. Va ser difícil ser la Yoshino de
siempre!
Sabia por todos los años
que nos conocíamos que de las tres la más centrada era Shimako, la más fuerte
era Yoshino y yo… y yo no sé que era…
Era muy difícil que
Yoshino llorara, eran contadas con los dedos de las manos las veces que Yoshino
se permitió llorar. Podría aparentar por su físico que era una chica tierna,
débil, hermosa y que inspiraba proteger pero la verdad era muy diferente. Ella
era muy fuerte y con gustos muy masculinos a excepción de la ropa pues se viste
muy femenina.
Yoshino cuando se sentía
débil o triste bromeaba más de lo acostumbrado o trataba de animar a otros
cuando era ella la más afectada. Sabía que por dentro su corazón sangraba de
dolor pero como dijo ella la máscara se quebró, no podía resguardar su
vulnerabilidad porque Rei-san era su debilidad.
-Hey, mírame- Dije
alzando su rostro. No quiero que rías como siempre mientras estas adolorida o
sostenerme cuando eres tú la que lo necesita. Soy tu amiga, tu mejor amiga. No estás
sola, déjame sostenerte. Poco a poco veremos una solución o el tiempo curara tu
corazón. ¿Vas a luchar por ella?
-En otras circunstancias
te animaría pues en la guerra del amor todo está permitido pero creo que es
mejor que te des tu espacio y pienses fríamente si quieres dar la vuelta o
luchar por ella.
- No necesito pensarlo…-
Dijo tozuda- Por eso quiero de una vez tratar este problema- Señalando a su
corazón- Por eso quiero saber si puedo
venir a vivir contigo…
-…
-Si no puedes lo
entenderé- Me dijo haciéndome ojitos de gatito-
-No es necesario que
utilices tu arsenal conmigo. Claro que puedes. Solo que no pensé que te
mudarías. Ósea. ¿No crees que te estés apurando?
-¡No!, no podría soportar
ver a ese tipo comerle la boca a la mujer que amo y ni mucho menos podría
soportar escuchar como la hace suya.
- Creo que ahora
entiendo- Había sido estúpida al preguntarle eso a Yoshino, obviamente Rei-san
iba a llevar ahora más seguido a su novio y cualquier cosa podría pasar- Tienes
razón. No me había percatado de eso, si estuviera en tu lugar también lo haría.
-No quiero ni imaginarlo,
Yumi. Por eso hoy voy a comunicarle que me mudare a tu departamento.
-Está bien. Creo que me
levantare a hacer la cena
-Claro que no- Dijo
poniendo sus manos en mis hombros y volviéndome a sentar en el sofá- Yo voy
hacer la cena- Que te apetece- Dijo tratando de hacer una sonrisa, una que no
tenía.
- Algo que nos guste a
las dos…
-Mmmm ¿Te parece un
saltado de pollo?
-¡Claro, me encantaría!
Me sonrió como pudo y se
fue a la cocina. Este día había sido un trajín y también lleno de impresiones. En
realidad desde que Yoshino había llegado esa vez a mi departamento diciéndome
que tenía una entrevista de trabajo todo había cambiado y sentía que el tiempo
pasaba más rápidamente, no dejándome asimilar en su totalidad lo que estaba
pasando
Me saque el saco y lo
repase de nuevo con la mirada, era curioso, ese traje me quedaba con exactitud
y si me ponía a pensar Sachiko-sama era unos casi diez centímetros más alta.
No quería calentarme la
cabeza pensando él por qué me quedaba como un guante pero la única conclusión
que sacaba era que lo había comprado para mí. ¿A qué hora o cuando? No lo
sé pero sería muy pretencioso de mi
parte creérmelo. ¿Ella como podría ser tan amable con mi persona?
Mi corazón de nuevo como
tambor resonó en mi pecho, sintiéndose dolido y feliz a la vez. Quería verla,
quería verla de nuevo con su computador portátil y admirar su belleza desde la
lejanía como un simple mortal que venera a una diosa.
Acordándome de su número telefónico, saque de inmediato el
celular, Mire su número sin pestañar,
tanto así que ya me lo había memorizado.
-¿Le llamo o le escribo?-
Me pregunte- Tal vez este ocupada así que le escribiré, agradeciéndole lo que
había hecho por mí.
Buenas Noches, Ogasawara
sama.
Muchas gracias por cuidar de mi persona. Le estoy muy agradecida.
El hospital me atendió muy bien. Mañana regresare a mis obligaciones.
Que tenga una reparadora noche.
Fukuzawa Yumi.
Mis manos sudaron al
instante que había enviado el mensaje.
¿Había sido correcto escribirle a esta hora? ¿Me respondería?
Anhelaba que así fuera y
como si hubiera oído mis pensamientos. Mi celular vibro. Una nuevo mensaje
había en la entrada y el destinatario era Sachiko sama.
Buenas noches Fukuzawa san
Me alegro que el hospital la haya tratado bien. Si no se siente bien
Hágaselo saber a Matsudaira san.
Que descanse. Tómese los
medicamentos que le receto el médico.
Ogasawara Sachiko.
¡Oh Dios me había
respondido! No había ninguna connotación romántica pero no podía dejar de leer
su mensaje. Se había preocupado por mí al hacerme acuerdo de los medicamentos.
No podía estar más feliz.
-¿Y esa sonrisa?-
Pregunto Yoshino, asustándome.
-Yo…
Antes que pudiera
contestar el timbre del departamento sonó en toda la estancia. Yoshino y yo nos
quedamos mirando, ya que ninguna de las dos esperábamos a alguien solo que
fuera…
-Estoy segura que es Rei
chan- Me dijo cabizbaja mientras el timbre sonaba por segunda vez.
-¿Le digo que no estás?
-No, eres como un libro
abierto y se vería en tu cara que estas mintiendo. Dijo con una mueca.
-Bueno no tengo la culpa
de no poder ser una buena actriz- Le dije en broma.
- Anda abrir la puerta
mientras veo como va el saltado
Yoshino se perdió
nuevamente en la cocina y yo me dirigí a la puerta, me asome por la mirilla y
efectivamente era Rei-san. Suspirando y
esperando que no hubiera una pelea me dispuse a abrir la puerta.
-¿Esta aquí Yoshino,
verdad?- Sonó esperanzada Rei-san quien estaba vestida con unos jeans rotos, un
buzo negro y zapatos deportivos rojos.
-Sí, pasa- Me hice a un lado
para que pasara y ella me abrazo ligeramente y me dio un pequeño beso en la
cabeza.
- Me preocupe mucho
cuando salió de la casa dando un portazo, no me contesta las llamadas ni los
mensajes- Dijo viéndome con tristeza.
-No he cenado- Dijo
escueta.
-Entonces pasa, Rei-san.
Yoshino ha cocinado algo riquísimo- Dije
alegre para que Yoshino relajase el cuerpo y no le saltara encima a Rei-san.
-Acompaña a Yumi, que
todavía no está la comida- Y así como si la presencia de Rei san quemara, salió
a paso rápido a la cocina.
Tomamos asiento y las dos
jugamos con nuestras manos en claro signo de ansiedad. Seguro ella quería
preguntarme porque Yoshino estaba enfadada y yo quería preguntarle porque estaba saliendo con un hombre.
-¿Cómo has estado? Rompió
el silencio Rei san.
-Bueno ayer tuve un
accidente en la empresa pero nade serio- Dije lo ultimo rápidamente al ver su
rostro preocupado.
-¿Qué paso?
-Me desmaye, caí por las
escaleras, se me inflamaron las caderas y me suministraron suero de vitaminas.
Bueno también hoy me mandaron al hospital. Eso en resumen- Dije al ver su cejas
fruncidas.
-Eso te pasa por no alimentarte
bien. Si te hubiera pasado algo grave. Yoshino estaría histérica, tus padres
volando hacia acá y yo estaría intranquila.
- Me hace feliz saber que
soy tan querida para esa atención. Pero como le dije a Yoshino, estoy bien.
-Gracias a Dios que es así-
Me brindo una sonrisa- Yumi, ¿Sabes porque Yoshino esta tan rara?
- Eh… Yo la veo igual-
Dije tratando de evadir el tema.
- Yumi, me estas
mintiendo se te ve en el rostro. Es por mi pareja, ¿verdad?
-Si ya sabes para que
preguntas- Me di cuenta que había sonado algo grosera- Lo siento, no estoy muy
bien que digamos- Mentí.
-Ya está la comida- Dijo
Yoshino entrando a la sala.
Nos levantamos y ayudamos
a poner el servicio y a poner los platos de comida. Rei fue a ver un vino a mi
alacena y Yo fui a por un cartón de jugo de manzana. Nos sentamos y procedimos
a comer sin alzar el rostro, concentradas en nuestro plato.
Solo el sonido de los
cubiertos chocando con los platos se escuchaba en la sala. Nos mirábamos de
reojo. Se sentía el aire denso y tenso. Me sentí ahogada.
-Rei- dijo Yoshino
limpiándose la boca delicadamente con la servilleta- Desde mañana me voy
a mudar con Yumi.
Rei alzo el rostro y mi respiración se altero un poco, Su
mirada paso de sorpresa a confusión y de confusión a enojo.
-¿Por qué?- Dijo con la mirada más seria que jamás le había
visto.
-Porque desde ahora
seguro necesitaras espacio y yo necesito libertad.
-¡Libertad! Yoshino, estoy saliendo con un chico, ¡no me estoy
casando!
-¿Lo quieres?- Dijo con voz quebrada.
-Claro que lo quiero…
- En hora buena- Dijo fríamente.
-Yo… no lo sé- Dijo mirándome, seguramente para que no dijera
nada.
- Eres mi adorada prima, no te voy a excluir. Por favor no
dejes la casa.
-Ya lo pensé y no daré mi brazo a torcer. Es mejor así, Rei
chan.
- Pero no entiendo por que
- Porque…- Tomo mi mano y yo la mire confundida- Estoy
saliendo con Yumi.
El pollo que tenia masticando en mi boca ahora lo tenía
atorado en la garganta y en un movimiento
asertivo de Yoshino me paso el juego de manzana y lo bebí despacio.
-Me estas tomando el pelo, ¿Verdad? Tú no puedes tener nada
con Yumi, ella es como tu hermana- Dijo riendo-
Yo solo me sentí como en la dimensión desconocida. ¿En qué
momento las cosas se habían enredado tanto? ¿Por qué Yoshino con la mirada me
rogaba para que le siguiera el juego?
-Yumi es cierto- Me miro seria Rei- san.
-Yo… yo… yo…
-La estas poniendo nerviosa- Dijo Yoshino molesta- No quiero que interrogues a mi
chica.
-No me lo puedo creer- Dijo Rei-san- Aun no creo que sea
cierto. Es algo que ni siquiera ustedes se lo creen.
Yoshino me miro derrotada. Era muy difícil engañar a Rei san y
sabia que Yoshino había inventado lo nuestro por impulsiva. Pero no podía dejar
así a mi amiga. Yoshino me debería una muy grande.
Delicadamente envolví mi mano con la de Yoshino y con decisión
mire su rostro para después bajar a sus labios. Podía sentir la intensa mirada
de Rei-san. Y agradeciendo que tuviera el cabello suelto la bese cerca de sus
labios, haciendo que mi cabello callera como cascada, tapando el supuesto beso.
Yoshino cuando me aleje me miro con los ojos abiertos para después
en segundos volver a la normalidad
-¿Ahora nos crees?
-Se que eres una buena chica. Que quieres a Yoshino pero si me
entero que le haces daño. No respondo. Ahora con su permiso, es mejor que me
vaya. Mañana puedes ir a ver tus cosas. Yumi puedes venir conmigo
-Claro…- Dije con algo de miedo de que se haya dado cuenta que
nunca la bese.
-Cuida a Yoshino. ¿En verdad tienen algo, no me están
engañando?
-Si
- Todavía no puedo creerlo. Me cuesta entender que tienen
algo. ¿Cómo paso?- La quede mirando y supe que se había dado cuenta que estaba
nerviosa. ¿Ahora qué le digo?
- Desde hace meses nos viene ocurriendo algo… y bueno hace
tres días atrás nos aclaramos y ahora tratamos de ver… si podemos tener algo.
-¿Ósea que no es oficial?- Sonó esperanzada.
-No, todavía no es oficial. Nos estamos conociendo como
pareja.
- Tienen que darme tiempo. Va ser muy raro verlas juntas.
- Espero no me estén mintiendo y no sea esto una excusa para
venirse acá contigo- Dijo duramente.
Hay si supieras que
acabas de adivinarlo- Me dije internamente.
-Quiero a Yoshino, puedes estar tranquila.
-Está bien. Es mejor que me marche- Me miro seria para solo
darme una palmada en la espalda y salir. Nunca se despedía de mí sin un beso y
un abrazo…
-¿Se lo creyó?
-No lo sé – Dije mientras aseguraba la puerta- Rei-san es muy
intuitiva.
-Disculpa por meterte en este embrollo
- Si las miradas
mataran ya estaría muerta- Dije riendo- Tal vez este confundida.
-Si me di cuenta, bueno tal vez esto me sirva para saber si me
quiere.
- ¿Piensas ponerla celosa?
-No pensaba hacerlo pero esto ha surgido solo…
-Bueno no sé si ahorcarte o tirarte de la ventana por meterme
en esta situación. Solo espero que no me tengas en este jueguito tanto tiempo.
La mentira no es buena.
-Lo sé por eso que crea lo que quiera. Yo solo quiero
reponerme- Dijo de nuevo llorando- Que pase lo que tenga que pasar. Al fin al
cabo creo que es mejor así. Ella es mi prima…
-No es tu prima, técnicamente si pero sabes que no.
-Yumi, tal vez esta es una señal para que me aleje de
ella y continúe con mi vida. Iré a lavar
la vajilla- Dijo esto último para darle fin al tema.
-Está bien. En el cuarto de huéspedes tienes ropa.
-Gracias- Me sonrió triste.
Mire como su silueta se perdía por la entrada de la cocina.
Suspire.
Me dirigí al sofá en que me había sentado y tome mi bolso.
Estaba por irme al dormitorio cuando vibro mi celular.
La pantalla se iluminaba anunciando un mensaje de la
operadora, lo tome de la mesita y sin querer vi la revista que me había traído
mi mejor amiga.
Al agarrarla comencé a pasar hoja tras hoja. Viendo
rápidamente los títulos que trataban este mes y cuando estaba a punto de
cerrarla en un encabezado…
La hija del magnate Ogasawara Tohru se casa
En una entrevista al
magnate Japonés Ogasawara Tohru. Nos informo que en dos meses su hermosa y
exitosa hija, quien maneja “La caja fuerte” de la empresa se unirá pronto en
santo matrimonio con el exitoso empresario y heredero de importantes empresas
japonesas e Italianas, Suguru Kashiwagi.
Ya de por si el tiburón
de los negociós Tohru, tiene una inquebrantable economía en la que su enorme
empresa nunca ha sabido de problemas
financieros, se fusionará eventualmente con Corporación Anko que es una de las
más grandes empresas manufactureras de Europa.
Estamos seguros que esta
unión será de gran beneficio para estos dos titanes.
El matrimonio será en
dos meses y se celebrara en Japón.
Por lo pronto esta es la
única información que se dispone de este acontecimiento pues al parecer la boda
será privada y no quisieron señalar una fecha.
Las lágrimas caían a
raudales de mis ojos mojando la noticia. Sin darme cuanta unos brazos rodearon
mis hombros.
-Hey… no llores. No es el
fin del mundo. Creo que la tienes difícil pero no imposible.
-No sé de que hablas…-
Dije jadeando
-Claro que lo sé. Lo he
sabido desde que la viste por primera vez en el colegio. Tal vez por algo estas
en esa empresa.- Me dijo para darme un beso en la cabeza- Tal vez el destino te
este dando una oportunidad.
Continuara…
5 comentarios:
excelente como siempre!! ^^ aww que emocionante de verdad, rei con un hombreeee?? eso no lo vi venir, jajajaja y de pobre yumi :P, saludos ^^
Un gran capitulo....estas mujeres como hacen sufrir a estas niñas...estare al pendiente del siguiente cap..Que estes bien...
Me quede sin aliento. Y sigo pensando...jodido Kashiwagi 7-7 esperare el siguiente capitulo de este fic que me encanta! ^^
No hay siguiente capítulo? Con lo buena que esta la historia...
No hay siguiente capítulo? Con lo buena que esta la historia...
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