Preludio Lunar.

La Maldición de la Luna, capítulo 16.

Después de dejar a Kiara a las inmediaciones de su trabajo…Cristina tomo rauda la autopista para ir a su trabajo e iba a llegar con un tanto de retraso, pero valía la pena ya que podía acompañarla, aunque le disgustaba tener que dejarla tan lejos, todo por la estúpida de su jefa. Quizás debía plantearle a su amiga que volviesen a ver el asunto con el abogado y ver que le sugería él, sin duda muchas cosas pasaban por la mente de la joven Loren, tantas cosas daban vueltas en sí confundiéndola por momentos. Decidió no pensar más y puso toda su atención en el camino, pues como estaba podía provocar un accidente por algún descuido y sin más se sumergió en la conducción.



Momentos más tarde una vez estacionado su coche en el sector designados para los empleados, tomo el elevador y marco el 6 sexto piso dónde se encontraba su oficina, chequeo su móvil y vio que tenía algunas llamadas perdidas y una en particular le llamó su atención, pero el tiempo apremiaba y debía poner su concentración en su trabajo ya tendría tiempo para verificar ese número.

Cuando la puerta se abrió se enfilo rauda al sector de control, marco como de costumbre su tarjeta, saludos a las secretarias  hasta llegar a su oficina, volvió a quedar sumida en sus pensamientos que no advirtió que los ojos grises de su asistente le vieron muy seria, por lo que no le saludo y entro a su despacho, dejo sus cosas en su armario y procedió a revisar en el taco las reuniones que tendría para el día y luego llamo a una de las secretarias para que le trajese los informes pendientes, olvidándose por completo que para ello tenía una ayudante, cosa que llamo mucho la atención de la joven secretaria, pero como era su jefa, sólo acato sus órdenes.

Mientras tanto en Erlington Company…

La joven Milovic tendría sus propias preocupaciones, ya que después de ser dejada por su amiga Cristina, tuvo que caminar un largo trayecto hasta la empresa, encontrándose con la sorpresa que el coche de su jefa se detuvo para llevarle, lo que hizo enfurecer un poco a la joven, pero pudo librarse de ella y de todos los odiosos que hicieron lo mismo. Resultaba increíble su hipocresía para con ella, cuando el día anterior todos tenían miedo de que ella se les acercara por no tener inconvenientes con Elizabeth Erlington y ahora resultaba que era como borrón y cuenta nueva, para Kiara las cosas no eran así de simples, si bien era de carácter jovial cuando le buscaban por la buena olvidaba las cosas restándoles importancia, pero en esta ocasión no, tenía su dignidad y qué decir que era extremadamente orgullosa y no se rebajaba por nada.
Cansada y contrariada llego a las instalaciones, se topo con la dueña pero logro hacerle el quite por otra alternativa que había descubierto, la cual sería una nueva opción para evitar a esa mujer, porque estaba decidida a seguir adelante con sus planes, aunque saliese perjudicada. Una vez llegada a su oficina comenzó de inmediato su labor y pidió informes a su secretaria y así continuará por un breve tiempo, ya que Elizabeth tenía planes para ella.

De vueltas en las oficinas de  System Global Lancester….casi cuatro horas después…

-este va  a ser un día muy largo por lo visto- murmuraba Cristina, tomando el fono- por favor  Linet  puedes traerme los archivos de ayer.
-sí señorita Loren- exclamo asombrada ella- disculpe que se lo diga…pero eso no lo maneja su asistente.

Cristina, abrió tremendos ojos al escuchar las palabras de su secretaria, había olvidado por completo que tenía una asistente y más aún. Ellas tenían una conversación pendiente sobre lo sucedido anoche y todo lo que descubrió con respecto a Jamiel.

-tienes toda la razón- acoto Cristina- ruego me disculpe y dejes nulo lo que te pedí.
-como usted diga- respondió la joven- pero si gusta le aviso a Jamiel
-te lo agradecería mucho- contesto Cristina y colgó- ¡cielos!, olvide por completo a Jamiel, la he ignorado toda esta mañana y para colmo no le salude, que mala educación la mía, en qué rayos estaba pensando.

A  los pocos minutos golpean a su puerta…

-adelante- señalo Cristina.
-con su permiso- dijo la joven Atkinson- aquí están los informes que Linet, me indicó que necesitaba.
-gracias Jamiel- acoto Cristina con la vista fija en la joven.
-bueno con su permiso- expuso ella- me retiro
-espera Jamiel- demando Cristina y se levanto de su escritorio hasta dónde estaba la joven- quería disculparme contigo por no saludarte hoy. Sucede que estaba distraída y pase de largo.
-no se disculpe- dijo Jamiel triste por la frialdad de Cristina para con ella- comprendo que hay cosas importantes en su vida que debe atender que un simple saludo y que por lo demás; carece de relevancia para usted. Así que no lo hago perder más su tiempo y la dejo trabajar tranquila.

Cristina, creyó morir ante el comentario de la joven, no pensó que su actitud causaría pesar en ella, se recrimino por lo bajo y cuando Jamiel procedía a irse de su oficina la tomo del brazo y la giró.

-perdona Jamiel- dijo apenada Cristina- no he querido lastimarte de ese modo, he sido una idiota.
Los ojos grises de la joven buscaron en los azules de Cristina; un indicio de verdad en sus palabras, pues tenía un fuerte dolor en su corazón desde que la dejo marchar temprano en la mañana y ahora; se agudizaba más al ver  su trato indiferente cuando llego a su oficina. La ignoró por completo. Solicitó a otras cosas que eran de su competencia y eso le tenía dolida; pues su corazón estaba loco por verle y poder demostrarle todo su amor que le había dejado entrever anoche; y ahora seguía con la misma forma de ser acostumbrada. ¡Cómo dolía todo ello! No merecía una cosa así. Bajo la vista aún más apenada y procedió a retirarse dejando a Cristina aturdida.

La joven Loren quedo perpleja, pues Jamiel no aceptó su disculpa y tampoco dijo nada más y se marcho del lugar. Volvió a su escritorio y se quedo unos minutos inerte sobre todos esos informes. No pudo conseguir concentrarse por más que los veía una y otra vez.
No podía quitarse de lamente el rostro visiblemente triste de Jamiel. Después de mucho rato de no conseguir nada. Tomó  el fono y marcó a su asistente.
─ Por favor Jamiel ¿puedes venir? - demando Cristina.
─ Enseguida- dijo sin emoción la joven, tono que irritó a Cristina pues le dio la impresión como si la estuviese forzando. Iba a terminar con todo ello de una buena vez.
Segundos después…entró  la joven a la oficina.
 ─ ¡Usted dirá qué desea señorita Loren! ─ repuso seria Jamiel.
─ ¿Señorita Loren? ─ exclamó molesta Cristina ─ ¿qué rayos te pasa hoy Jamiel?
─ Nada ─  dijo resueltamente Jamiel.
─ ¿Cómo que nada? ─  refutó indignada Cristina ─ te di una disculpa por mi olvido y no te importó y ahora actúas tan formal conmigo.
─ ¡Usted me disculpará! ─ Exclamo molesta Jamiel ─ pero sólo actuó como debe ser. Usted es mi jefa y yo su subordinada; por lo tanto no hay nada malo en eso. Esa es la ética que se debe tener en cualquier trabajo, ¿no le parece?
─ ¡No me vengas con esas! ─ Bramó Cristina y se acercó peligrosamente hasta Jamiel ─ ¡A mí no me des una lección de ética profesional! ¿Me oyes? Cuando siempre has estado casi encima de mí respirándome y no te he dicho nada al respecto, por lo que puedes ir dándole a otro tu consejito.
─ Me queda claro ─ Respondió aún más molesta la joven ─ No volveré a incomodarle más. De ahora en adelante  me ceñiré a lo estrictamente laboral y no habrá ningún trato más en lo personal. Así que, si no tiene algo que ordenarme referente a lo profesional, quisiera retirarme.
Al ver que la joven se daba vuelta para irse del lugar, la tomó fuertemente de los brazos evitando que se fuera. Sus ojos azules estaban chispeando por lo desafiante de la que hasta hora consideraba una dulce jovencita.
─ ¡Con un demonio! ─  rugió Cristina ─ No vas a ir a ningún sitio.

Y  sin previo aviso,  tomó de la cintura a la joven y la atrajo fuertemente hacía sí y se apoderó  a la fuerza sus labios. Los ojos de Jamiel; se abrieron como plato ante la acción de la mujer que amaba.  Sabía de la furia que solía dominar a los hombres y en lo que terminaban sus acciones. Pero no concebía que la hija de la Luna también tuviese ese tipo de comportamiento; por lo que luchó con todas sus fuerzas para zafarse de ese abrazo…pero fue inútil…pues Cristina imprimió más fuerza, dejándola totalmente neutralizada. No quería dejar ir a la joven Atkinson; lo que vivió anoche con ella por muy breve que fuese; la marcó a fuego. No sabía bien porque, pero no iba a dejarla ir.

Cristina, cuando sintió que Jamiel ya no luchaba más…cedió en su abrazo y lentamente éste se fue volviendo cálido y tierno para la joven…su beso conllevaba la ternura y amor que habían dentro del corazón de Cristina y Jamiel;  pudo sentirlo. Supo en ese momento que jamás su hermana Kiara le arrebataría el corazón de su amada y Jamiel; dejo de sentir en sí, esa molestia y pena dentro de su ser. Correspondió a sus caricias y entrelazó su cuello con sus brazos. Mientras que la joven Loren; exigía más de Jamiel. Quería que le entregase lo que le prometió anoche; su corazón y su amor. Por fin estaba tomando conciencia que la joven Atkinson no era una simple mujer en su vida…era mucho más…Ella había despertado en su corazón un sentimiento que comenzó a latir desde anoche y que ahora, no se iba a apagar y mucho menos acallar.

Después de buen rato… se fueron separando lentamente…sin perder el contacto visual entre ellas…los ojos de ambas lo decían todo…Krastian (la princesa Lunar) descubría su verdadero amor…el que estuvo buscando por tanto tiempo…todavía habían muchas preguntas con respecto a Kiara…y sabía que el tiempo se las daría…ya sabía que amor de parejas entre ellas no sucedería nunca…por ello, dejaría las cosas fluir con Jamiel…era esa joven…la que estaba consiguiendo lo que ninguna otra mujer ha logrado…algo dentro de su ser…se lo decía y su mente le advertía que no estaba equivocada…Jamiel Atkinson… iba ser muy importante en su vida de ahora en adelante…un profundo suspiro salió de su ser…haciendo que Jamiel  acariciara con mucha ternura el rostro de Cristina.

-te amo Cristina- dijo llanamente la joven- te extrañe tanto que no hallaba las horas de volver a verte.
-Jamiel perdóname- imploro Cristina, abrasando aún más a la joven- no fue mi intención hacerlo como tampoco ser tan ruda contigo ahora, pero en verdad no deseaba que te fueras, anoche contigo viví un momento único y que ahora lo he vuelto a sentir, te lo ruego discúlpame.
-no  te disculpes más- dijo Jamiel - ya paso, quedo en el olvido, ahora me interesas tú nada más. ¿Quiero saber Cristina sí yo significo algo en tu vida?
-Jamiel- respondió cristina- claro que significas mucho para mí, de lo contrario nunca me hubiese atrevido a besarte. Tengo sentimientos hacia a ti que están comenzando a despertar, es un sentimiento tan cálido y agradable que no experimente antes y en cierta forma; me confunde un poco, ya que debo confesarte que desde que te conocí te encontré un mujer hermosa y tierna, más ese mismo día me forme una mala impresión de tu persona que derivó en cierto rechazo hacia ti.
-lo sé muy bien- confirmo Jamiel- pude apreciarlo cuando entre a trabajar para ti.
-pero eso ya es pasado- contesto Cristina- ahora es distinto, desde anoche tú significas algo especial en mi vida, no sé sí es amor aún, pero quiero que me des la oportunidad de descubrirlo a tu lado. Jamiel  necesito que vengas conmigo, ¿quieres acompañarme almorzar?
-claro que sí- respondió Jamiel, volviendo a besar a Cristina
-entonces vámonos- agrego Cristina
-pero el trabajo- repuso la joven.
-verás Jamiel- dijo pícara Cristina- lo veremos más tarde, adelantaremos media hora nuestra colación.
-¿se permite hacer eso?- inquirió Jamiel muy intrigada.
-claro que sí- respondió Cristina- mientras cumplas con todas las horas de trabajo como corresponde no hay problema.

La joven Cristina tomo sus cosas y dejo órdenes a su secretaria de ciertos trabajos y se fue a recoger a Jamiel…pero antes de llegar con ella, recibió una llamada de Kiara, avisándole que debía asistir a una reunión de trabajo con su jefa…aunque le desagrado escuchar lo último, no podía remediarlo pues era el trabajo de su amiga y acepto ir a recogerla una vez concluyera dicha reunión…se quedo pensando unos minutos sobre ello…”tal vez Elizabeth si sea la mujer para Kiara” reflexiono Cristina…segundos después…

-nos vamos Jamiel- demando Cristina con una hermosa sonrisa.
-vamos- contesto la joven Atkinson

Francia…céntricas calles de París.

Por otra lado cerca de la orillas del rio sena…una joven medita cuidadosamente toda la información recopilada hasta el momento…no encontró lo que estaba buscando…pues ya no trabajaba ahí…pero le dieron información muy valiosa al respecto…tenía que tomar una decisión sobre ello…pues iba con los métodos tradicionales de ir de lugar en lugar hasta dar con su paradero….o….comenzaba a rastrearla haciendo uso de sus nuevos talentos adquiridos…como fuese ello…sabía que tarde o temprano la encontraría.

La joven desvió sus pasos hacia  la calle Rue Du Pont Neuf  en busca de un buen restaurante y se quedo con el Kong y  disfrutar de una pequeña exquisitez Francesa…disfruto su vino entre varias cosas…hasta que decidió volver a dónde se estaba alojando el hotel Regina, iba quedarse unos días más…no había prisa por el momento…tiempo era el que tenía de sobra y en cuanto a su presa…sabía muy bien ese carácter que ella poseía….nadie iba a conquistarla tan fácilmente…lo vivió en carne propia…después de su ruptura…pero si llegará a suceder lo contrario…el factor sorpresa nunca fallaba…y dónde hubo fuego…cenizas quedan…
Los ojos celeste de la joven resplandecieron  y volvió la vista al cielo….y vio asomarse la luna creciente…eso indicaba que las cosas se volverían especiales…lo mismo para ella….la luna llena…justo en Paris…una sonrisa burlona se dibujo en su rostro…¡Qué  ironía de la vida!


Inglaterra….Londres en la autopista Euston Rd

Momentos más tarde el coche de la marquesa se detuvo en el estacionamiento del The Bently Hotel London….Ambas mujeres bajaron del coche en dirección de este, aún era temprano para que sus socios llegasen…una vez que fueron conducidas a su mesa. Elizabeth ordeno que le trajesen el mejor platillo para ambas…

-espero que te guste- acoto Elizabeth- y recuerda no aceptaré un no, quiero verte alimentarte bien, así que no me dejes ni siquiera una miga en él, está claro.

-la verdad no tengo apetito- contesto Kiara- pero no la voy a contradecir esta vez

Elizabeth estaba impresionada, Kiara no le estaba dando pelea y eso era asombroso, por tanto decidió jugársela con todo para esta noche…se levanto por unos momentos e hizo unas llamadas y luego retorno a la mesa para degustar junto a la joven el pedido que acaba de llegar.

30 minutos más tarde, fueron llegando cada uno de los socios de Elizabeth y ella les presento a su joven asistente, por último hacía su entrada la última persona…Victoria Calaghan…una morena alta,  de una excelente complexión física y bien dotada de sus atributos…al momento de ser presentadas, miro de pies a cabeza a kiara….lo que provoco de inmediato la reacción de la joven y su mirada se volvió más altiva que nunca, pues intuyo que era ella, la persona que estaba en su contra…todo esto no paso desapercibido a los ojos de Elizabeth, quién sonría malévolamente…

“ahora verás Victoria de lo que está hecha Kiara y probarás su furia por  haberte atrevido a insultarla” se dijo para sí la marquesa.

Después de terminada las presentaciones, Kiara , procedió a explicarles cada uno de los detalles que se habían encontrado en el proyecto…todos los socios tomaban atención y discutían con sus respectivos asistentes….la joven Milovic les hizo hincapié de que si el proyecto no era modificado en sus comienzo estaba destinado al fracaso a corto plazo…la reunión ya llevaba dos horas de iniciada, ya que tuvo que explicar detenidamente cada uno de los puntos a modificar…lo que generaba un descontento de parte de los socios, en especial de Victoria Calaghan.

-podrías decirme en qué te basas para suponer que  este proyecto fracasará antes de tiempo- dijo despectivamente la mujer.
-muy simple- contesto Kiara- el que diseño el proyecto no tomo en cuenta estos puntos que plantee y que a larga significaría haber desperdiciado su dinero estúpidamente.
-eres muy arrogante de tu parte- bramo ella ante las palabras de la joven - como para insultar a expertos que llevan años de experiencia más que tú.
- no dudo que tengan más experiencia- dijo burlonamente Kiara- pero su falta de visión es más que obvia, no es llegar y tirar números a tontas y a locas y nublarles a ustedes su juicio con tal de vender un producto. 

Es más me gustaría saber quién elaboro el informe final para que fuese aceptado por todos ustedes.

-detente ahí- contesto molesta Victoria- no permitiré que insultes a mi gente.
-¡ah!- dijo sarcástica kiara- entonces debo suponer que el error es de su compañía, eso explica mejor las cosas. Déjeme informarle señorita Calaghan, que por culpa de sus empleados debe reformular económicamente este proyecto, les  sugiero que piensen hacer una mayor inversión ahora y que genere ganancias en tres años como mínimo, a tener que invertir dinero a largo plazo en un proyecto que no será rentable por lo menos dentro de de 10 a 15 años, pues se estará constantemente tratando de solventar un hoyo sin fin, cosa que no es aconsejable, ya que con el tiempo esto acarrearía otro tipo de inconvenientes y podría transformarse en una tragedia, dada las especificaciones técnicas  con las cuales se formulo el proyecto.
-creo que estás exagerando- rabio Victoria.
-por quién me toma- desafió Kiara- no soy ninguna irresponsable e hice las averiguaciones con un experto en construcción, quién me garantizo que por el bajo costo  y la calidad en los materiales habrían problemas de infraestructuras en un corto plazo- señalo Kiara muy altiva- aquí tiene usted el informe firmado por el profesional que acredita y respalda la evaluación que le pide.

Victoria tomo los documentos de muy mala gana y los reviso junto a su asistente.

-lamento decirte que no haremos modificaciones al proyecto- dijo cortante Victoria- pues mis expertos avalaron todo esto.
-déjeme informarle señorita Calaghan, que sí usted persiste en no replantear económicamente este proyecto, yo no daré mi visto bueno y tampoco firmare ningún documento que lo respalde y  ponga en riesgo los intereses de la señorita Erlington.- dijo cínicamente Kiara.
-estás de broma o qué- rugió Victoria.
-a usted le parece que yo esté bromeando- dijo molesta kiara- por culpa de su ineficiencia, arriesga a perder la inversión de todos y por mi parte no le permitiré que ponga en riesgo a la compañía Erligton, no le firmare ningún documento que provenga de usted hasta que haya evaluado seriamente los punto objetados.
-Elizabeth- exclamo Victoria- supongo tendrás algo que decir al respecto.
-ya has  escuchado a mi  directora  y asistente - dijo seca Elizabeth.
-pero- dijo Victoria confundida ante la respuesta de Elizabeth
- señorita Calaghan- dijo mofándose Kiara- no debería escudarse en la señorita Erlington, pues no es con ella con quién debe lidiar sino conmigo, yo soy su representante y como tal no dejaré pasar por alto este tipo de errores, por lo tanto; le sugiero que se calme y junto a su asistente revisen una vez más el proyecto, ¿le parece si les damos unos minutos para ello?
-te lo agradecería- contesto el asistente de Victoria
- de acuerdo- respondió Kiara.

Pasaron dos horas más entre la revisión del proyecto y las nuevas modificaciones a realizar, hasta que todos estuvieron de acuerdo en llevar a cabo lo solicitado por Erlington Company…cada uno de los socios firmo el acuerdo ante kiara, quién disfruto su triunfo ante Calaghan…una vez finalizado su reunión…ésta se acerco a Elizabeth y se disculpo por sus comentarios anteriores y reconoció los meritos de sus asistente, pero  no conforme con ello, probo una vez más a Kiara.

-Kiara, veo que junto a Elizabeth harán una formidable dupla en los negocios- exclamo Victoria- dime una cosa, si yo te ofrezco el doble de lo que te paga Elizabeth,¿ aceptarías trabajar para mí?

Elizabeth,  que no tuvo ninguna participación en toda la velada, reaccionó de inmediato ante la provocación de su socia e iba a disolver su sociedad en el acto tras escuchar semejante propuesta, pero no alcanzo a pronunciarse, ya que Kiara intervino antes….

-usted me disculpará señorita Calaghan- sentencio Kiara molesta- pero yo no me vendo al mejor postor y mi lealtad está garantizada una vez que firmo un contrato laboral, para su información tengo muy claro el concepto de ética profesional a pesar de ser extranjera.

Con estas palabras la joven humillo a Victoria, quién se limitó a sonreír nada más un poco abatida por no doblegar a la asistente de Elizabeth.

-es una lástima- dijo ella- pero acepto mi derrota, tienes lo mejor Elizabeth no cabe duda, ahora si me disculpan me retiro.

Mientras en otro sitio…en el Gorndon  Ramsay at Claridge’s.

-hemos llegado- acoto Cristina, entregando sus llaves a un valetparking- espero sea de tu agrado este lugar Jamiel
-es hermoso el local a simple vista- reconoció Jamiel- tengo plena certeza de que si me has traída acá debe ser uno de tus lugares preferidos o ¿me equivoco Cristina?
-está en lo cierto- adujo la joven sorprendida- de verdad me sorprendes ¿cómo lo supiste?
-muy simple- respondió Jamiel- va con tu forma de ser, se podría decir que es como tu sello personal, la elegancia y buen gusto en ti se nota mucho, pero eres una mujer muy sencilla en tu vida cotidiana.
-gracias por el cumplido- manifestó Cristina
-no es un cumplido- afirmo la joven Atkinson viendo fijamente a Cristina- es la verdad.

Cristina; siempre se ha  caracterizado por tener una personalidad muy alegre y dinámica, por lo que muy rara vez suele avergonzarse ante los comentarios de otras personas, devuelve sus gestos con una amplia sonrisa en agradecimiento cuando lo amerita o en caso contrario hace conocer su molestia de una forma educada, a excepción de su gran amiga que es algo más íntimo. Pero en este caso; las palabras de la joven produjeron un cierto nerviosismo que derivo en que sus mejillas sonrojaran levemente, acto que no paso desapercibido para los ojos de Jamiel, quién beso sutilmente su mejilla para no exponerla en público, ya que aún no estaba definida su situación afectiva con la joven Loren por más que ella le amase, debería ser paciente tal como se lo indicase su madre.

Minutos más tarde ambas chicas eran acomodas en un sector privilegiado con una hermosa vista, el garzón procedió a presentarles el menú…Ambas escogieron según sus gustos…Cristina decidió ausentarse por unos segundo para la hablar con el encargado…éste escucho atentamente a la joven y llamó a un botones dándole instrucciones según lo solicitado por la joven…al rato estaba nuevamente en compañía de Jamiel.

-tú dirás Cristina- exclamo de súbito Jamiel- ¿para que deseabas que te acompañará?
-primero que nada- contesto ella- te invite a almorzar, lo cual agradezco mucho y también me sirve para terminar nuestra conversación pendiente de hace un rato.
-gracias por la invitación Cristina- expuso Jamiel- ¿qué me vas decirme al respecto?
-siempre muy directa querida Jamiel- dijo sonriente Cristina - me encanta tu franqueza. Con respecto a tu pregunta deberás esperar  un poco, pues estoy a la espera de ciertas cosas, mientras tanto deseo saber sí lo que me dijiste anoche era  cierto o fue para consolarme por en el estado en que me encontraste.
-no sé si ofenderme con tus palabras o ignorarlas- señalo vivaz Jamiel- el punto es; que deseo que entiendas que jamás hecho o prometido cosas  por lastima y menos que tenga relación en la parte sentimental, pues no se debe andar declarando a diestra o siniestra que tu amas a todo el mundo o a cualquier persona que se te cruce en el camino. El amor es algo único  que no se siente con cualquiera y tampoco ser  vapuleado como todo el mundo  suelen hacerlo y existe una diferencia muy grande entre ese sentimiento y el cariño. Por mí parte;  todo lo que dije anoche frente a ti es lo que hay dentro de mi corazón, puede que a tus ojos me sigas viendo como una muchachita, pero sé muy bien lo que quiero y lo que siento por ti y ello no nació  de la noche a la mañana como tampoco de una atracción. Mi forma de amar es muy sincera así como mis palabras Cristina.

Cristina escuchaba muy atenta…fijo se aún más en los ojos  grises de Jamiel y se perdió en su profundidad…no encontró rastros de engaños…por el contrario en ellos se reflejaba una gran ternura hacia su persona y una sinceridad profunda…hasta el punto de volver hacerle sonrojar…causando más asombro en Cristina…pues Jamiel, tenía el poder para desarmarla con la mirada y ponerla en jaque sin mediar una sola palabra…busco la forma de pasar inadvertida  ante los ojos de la joven…pues quería descubrir más cosas de ella…pero con calma…no deseaba apresurarse del todo…si bien le había dicho que deseaba encontrar a su lado el amor…requería de un tiempo de conocimiento mutuo…por lo por unos minutos se tomo su tiempo y reflexiono en las palabras de la joven…al cabo de esto decidió hablarle con sinceridad.

-no he querido ofenderte con mi pregunta- señalo Cristina- comprendo muy bien tu punto de vista y para mí también el amor no es cosa de juegos, es un tema muy serio y delicado. No ando en busca de aventuras por ello;  me he mantenido soltera mucho tiempo. Tú  me disculparás por lo que voy a decir, pero tampoco estoy desesperada por que alguna mujer que pase a  mi lado quiera ligarme con ella y tenga que aceptar ello de buenas a primera. Soy una mujer ante todo y me respeto a mi misma y como todas deseo algo serio con una mujer, sincero y que provoque en mi el deseo de pasar el resto de mi vida a su lado, en pocas palabras Jamiel, yo también deseo amar  sinceramente y procurar con mi amor hacer feliz a la mujer que esté a mi lado y se convierta en mi pareja.

Los ojos de Jamiel centellearon en el acto…esos sentimientos que abriga el corazón de su amada, le hacía comprender que era ella la persona indicada para ser su esposa y el destino venía a corroborar aquel lazo que las unía plenamente…Sin duda Cristina sabía muy bien lo que quería del amor y de una mujer…por tanto iba a jugarse también su oportunidad de demostrarle que sus sentimientos eran muy sinceros y que sólo ella iba a quedarse con el corazón de la joven Loren…Sin previo aviso y sorprendiendo a Cristina, inclino su cuerpo hacia adelante y capturo sus labios, saboreando muy lentamente su interior…en una forma sensual y a la vez dominante…que dejó a Cristina temblorosa…y luego volvió a ocupar su lugar…sin dejar de ver esos ojos azules…que estaban conmocionados.

-Ahora puedes hacerte a la idea que no fue por lastima lo  de anoche- expuso Jamiel- voy muy enserio contigo Cristina y no me detendré hasta que me aceptes en tu vida, mi amor por ti es muy genuino y esto  es una muestra de lo que siento dentro de mi corazón hacia ti.

En el momento que la joven iba a decir algo…fueron interrumpidas por el encargado que traía el encargo de Cristina…lo cual agradeció y miro directamente a la joven que tenía frente a sí.

-Entonces Jamiel- exclamo Cristina (toma entre sus manos las de la muchacha y entrega un arreglo floral  en forma de corazón de rosas blancas y rosadas)- quiero que me  brindes la oportunidad de descubrir el amor a tu lado,  Jamiel Atkinson,  ¿quieres ser mi novia?

Jamiel;  sintió arrancarse su corazón dentro de sí…la emocionaba en lo sumo el que Cristina le hubiese mandado hacer ese obsequio especialmente para ella…era tan hermoso el detalle…pero más especial e importante fueron sus palabras…las que deseaba escuchar de hace tiempo…aunque aún no fuera amor de su parte…Cristina le estaba demostrando que ella era importante en su vida, tanto así como para pedirle ser su novia…sin más, dejo el obsequio sobre la mesa y se puso de pie e hizo que Cristina también lo hiciera…y sello en sus labios su respuesta….la cintura de la joven se vio envuelta en los brazos de la joven Loren…y permanecieron así buen tiempo, a vista y paciencia de todo el mundo que estaba en el lugar….pero eso a ellas poco les importo…sólo se entregaron al cálido sentimiento que surgía dentro de ellas dos…sólo más tarde…ambas volvieron a sus lugares…

-entonces mi adorada Jamiel- inquirió sonriente Cristina- entiendo que tu respuesta es sí.
-claro que lo es- afirmo sonriente- acepto ser tu novia Cristina Loren.
-no sabes la dicha que me da el oírtelo decir- adujo Cristina- pondré todo de mí para hacerte feliz Jamiel, pero quiero que estés muy consciente que aún no puedo llamarle amor a este bello sentimiento que tú provocas en mí, pero eso no significa que esté jugando o vaya a ser un mero intento de tener una relación y después tirarla por la borda, te puedo garantizar que ello no ocurrirá, ya que usted señorita Atkinson ahora es mi novia y te prometo darte lo mejor y esforzarme al máximo por ser digna de tu amor y corresponderte en la misma medida.
-eso lo tengo muy claro mi querida Cristina- menciono muy sensual Jamiel- eres una mujer muy integra y sé que no faltarás a tu palabra, pero por sobre ello, mi amor por ti  y mis actos harán que vaya haciendo mío tu corazón con el  tiempo. Sabré ser muy paciente contigo y créeme que de dónde provengo eso es una cualidad que nos caracteriza así como nuestra fidelidad, pues ahora tú tienes mi palabra que has de ser la única mujer en mi vida y has de saber que yo soy plenamente dichosa de ser tu pareja.
Cristina la tomo de la mano y le beso tiernamente, sin apartar sus ojos de la que ahora es su novia y a través de su mirada se ve reflejado su sentir…
En eso…
-señoritas- exclamo el garzón- con su permiso, aquí está su orden (procedió a servirles sus platillos y destapo una botella de un bue vino, llenando sus copas) espero lo disfruten. ¿desean las damas alguna otra cosa?
-no muchas gracias- contesto Cristina- cualquier cosa que necesitemos se lo hacemos saber.
-muy bien- dijo el garzón- con su permiso (retirándose del lugar)

Cristina tomando su copa y viendo muy seductora a Jamiel…

-propongo un brindis por nosotras- expuso Cristina- para que lo que hoy se inicia entre nosotras sea perdurable y el amor más grande que pueda existir mi adorada Jamiel. Te ofrezco todo mi corazón, mi vida y mi tiempo, procurando que todos nuestros momentos sean un gema que adorne tu corazón cada día y seas plenamente feliz. Salud por nosotras Jamiel (estrellando sutilmente su copa con la de su novia)
-Porque también mi amor sea causante de tu mayor dicha y plenitud, que encuentres en él todo cuánto has anhelado y en mi brazos halles el refugio y la paz que siempre necesites en todo momento y más cuando estés cansada. Gustosa te entrego lo que ya es tuyo, mi corazón y mi amor te pertenecen Cristina (tras decir aquello bebió de su copa mientras devoraba con sus ojos a la que ahora es su novia)

Ambas jóvenes disfrutan del instante…comienzan ellas a escribir su propia historia…cargada de ternura y un gran deseo de conquistarse mutuamente…Tiempo más tarde entre copas y una grato almuerzo la joven pareja tras pagar su consumo sale del local en dirección del  automóvil…en ellas hay un nuevo brillo en sus ojos como en sus actos…Cristina conduce a  su novia del brazo sin soltar esa mano que ambas tienen entrelazadas…Es hora de volver a sus labores…pero para la joven Loren esto significa mucho…es hora de darse una oportunidad para amar y se ha prometido hacer hasta lo imposible por conquistar el corazón de su joven prometida…
En esos mismos instantes, pero en otro sitio…y…
Después de 5 largas horas al fin había acabado la dichosa reunión de negocios y kiara pudo respirar un poco….
-te felicito- susurro en su oído Elizabeth- has estado soberbia, nadie más te volverá a humillar, eres una mujer extraordinaria Kiara, estoy muy orgullosa de ti.
-gracias- dijo la joven, un tanto nerviosa por la cercanía de su jefa.

 Segundos después Kiara, sacaba de su chaqueta su móvil para llamar a Cristina, pero antes que pudiese discar un solo número le era arrebatado de sus manos por Elizabeth.

-no Kiara- suplico Elizabeth moviendo su cabeza- quédate conmigo esta noche, deseo me acompañes a un lugar que te sorprenderá, acepta mi invitación.
-lo lamento- dijo kiara- pero mañana debo trabajar. Tal vez para otra ocasión.
-por favor- suplico Elizabeth y tomo entre sus manos las de la joven- dame ese gusto, mañana yo misma te traeré al trabajo sí tú me lo permites claro está.

La joven quedo muda ante las palabras de Elizabeth, ésta por su parte tomo el rostro de la muchacha y busco sus labios, y deposito un beso  sobre ellos, muy suave y gentil. Kiara se paralizo ante la caricia de su jefa, pero esta vez no estaba con deseos de reñir con ella y medito por unos segundos antes de responder.

-no te arrepentirás Kiara- dijo la marquesa- confía en mí.
-está bien- respondió Kiara- le acompañaré, pero debo advertirle que después de eso iré a casa, estoy un tanto cansada y lo único que deseo en estos  momentos es mi cama.
-te prometo que si no es de tu agrado- acoto la marquesa- yo misma te llevaré a casa, pero me gustaría disfrutar de tu compañía y que me des la oportunidad de que puedas conocerme en otra faceta.

Kiara, le miro con mucha curiosidad, sí hubiese sido esta la ocasión de conocerse por primera vez no hubiese creído la fama que poseía, pues ahora le veía de un modo distinto, le resultaba abrumador el encanto y ternura que Elizabeth tenía  para con ella, realmente Kiara no sabía que pensar, la estaba desarmando lentamente con sus actitudes, sí seguía así muy pronto bajaría la guardia con ella y por la forma que estaba respondiendo su cuerpo ante cualquier contacto físico con Elizabeth, le estaba indicando que su corazón se estaba dejando conquistar por la joven Erlington y eso la tenía sumamente preocupada, pues no tenía intenciones de enamorarse de ella, ya vería como le haría para solucionar esto, por el momento se iba permitir conocerla de algún modo, pues no podía evitar sentirse bien en su compañía en estos instantes, debía admitirlo, su jefa la tenía un tanto embrujada este día.
-de acuerdo- respondió Kiara- le tomare su palabra, algo me dice que sabrá respetarla.
-no dudes de ello Kiara- dijo sonriente Elizabeth- verás que disfrutarás esta noche y será el preludio de muchas más.

Elizabeth se incorporo de inmediato y ayudo a la joven a colocarse su chaqueta y luego tomo sus cosas y abandono el local con Kiara de la mano…la joven Milovic no opuso objeción ante el acto de la marquesa.

Una vez dentro del vehículo Elizabeth dio instrucciones a James hacia dónde deberían dirigirse…la marquesa atrajo a la joven hacia su cuerpo e hizo que descansará…muy pronto kiara se quedo dormida producto del cansancio y también del estado anímico  y presión en que estuvo sometida durante el día….
-duerme amor- dijo Elizabeth- muy pronto te sorprenderás, voy a preparar el camino para nuestro encuentro, sin duda este día ha sido fenomenal, jamás imagine después de todo lo que ha sucedido entre nosotras, el estar así de este modo, realmente estoy contando las horas para que podamos enlazarnos, oh Kiara, si supieras cuánto te necesito, mi vida ya no es la misma, no tiene sentido si tú no estás conmigo.
Elizabeth acaricio el rostro de su amada mientras ésta descansaba en su regazo, su cercanía le era tan grata e indispensable, que de sólo pensar que podría tenerla de esa forma  todos los días, dejaba en su corazón una inmensa satisfacción, muy pronto ella podría amarla como siempre lo ha deseado, cuidaría de ella, la consentiría en todo y por sobre todo formaría una familia, esa que nunca pudo tener y disfrutar por la circunstancias que dieron origen a su eterno vagar por esta tierra…sin duda Elizabeth Erlington comenzaba a saborear pequeñas gotas de dichas junto a su pareja.

En System Global Lancester…

Tras revisar facturas, evaluar proyectos y firmar una serie de oficios…Cristina concluía su labor del día, pero aún restaban unos minutos para irse a casa…se recostó sobre su asiento y chequeo su celular…claramente Kiara no iba a llamarla…lo intuía y en parte comprendía que era lo mejor…tanto ella como su amiga debían continuar con su vida…jamás la dejaría de lado, siempre estaría al pendiente de ella…pues Kiara  Milovic era todo lo que le quedaba…después de enfrentar a sus padres y ser desalojada de casa y desheredada de inmediato por sus progenitores por defender sus ideales y es especial su estilo de vida…pues sus padres pegaron el grito en el cielo cuando les dijo que le gustaban las chicas y que de hecho salía con una compañera.

Su padre abofeteo muy duro a su hija y la lanzo contra la pared…le grito, humillo e intento agredirla físicamente  con un objeto pesado si no hubiese sido por la joven Milovic que estaba  en casa en esa ocasión realizando un proyecto en conjunto…tuvo que interrumpirlos  ya que su padre entro como alma que lleva el diablo al encontrar una carta de la chica con quién salía…se la llevo a su estudio y fue un verdadero infierno lo que siguió a continuación a vista y paciencia de su madre, que no hizo nada por defender a su hija…pero si lo hizo Kiara…que después de escuchar los gritos…salió a buscar a su compañera y ahí fue testigo de la golpiza que Cristina estaba recibiendo de parte de ese hombre…que había dejado la puerta abierta sin importar nada…pues en esa casa nadie se atrevía a contradecirle.

Kiara, detuvo fuertemente la mano del hombre y amenazo con denunciarlo si no se detenía…al escuchar aquellas palabras se retracto y como enajenado las corrió literalmente de su casa…dejando a su hija más que con lo puesto…la joven Milovic se llevo a su departamento a su amiga…pues llevaba un par de meses sin Mariana… y busco la forma de curar sus heridas…hasta que la muchacha se repuso y con la ayuda de su abuela materna, pudo continuar sus estudios y solventar sus gastos…Junto a Kiara consiguieron trabajo los fines de semana…se complementaron de maravillas juntas…poco antes de egresar  de la universidad, su amada abuela falleció…pero no dejo desamparada a la joven…pues quedo como  dueña absoluta de todas sus cosas…con ello también dejo una carta a la muchacha, dónde le manifestaba que hiciera de todo ello su voluntad…y eso hizo…se recibió y vendió todo cuanto era suyo y le suplico a su amiga que vendiera su apartamento y se fueran a Europa a probar suerte…con recomendaciones de sus maestros hicieron sus maletas y llegaron a Francia…rentaron un apartamento juntas y emprendieron la tarea de encontrar un puesto de trabajo…al principio fue duro…debieron trabajar en pequeños restaurantes como dependientas  a la espera de que sus solicitudes fuesen aceptadas…poco tiempo después Kiara fue llamada a trabajar al Sabra Bank y al mes siguiente conseguía una vacante para Cristina en el mismo banco…estudiaban francés en las noches gracias a la capacitación que les entregaba su institución…fueron buenos tiempos para ambas chicas….hasta que uno de los gerentes…les propone que se vayan con él a la nueva sucursal de Alemania…aceptaron sin pensarlo.

Volvieron a empezar, pero esta vez contaban con trabajo seguro…fue ahí donde ambas lograron más cosas…Cristina se especializo en  mercado internacional y Kiara en fotografía…logro encontrar un puesto como fotógrafa suplente de una galería en Berlín…fue un año intenso apara ambas chicas…entre trabajo, curso de Alemán y una que otra diversión…se les presento una idea de una amiga de trabajo de la galería…que fuesen a Inglaterra, ya que ambas tenían dominio del idioma y eran excelentes profesionales…así que con recomendaciones de su empleador se fueron una vez a la aventura.

Cuántos recuerdos iban y venían en la mente de la joven Loren…una solitaria lágrima rodó en su mejilla…

-jamás te abandonare- murmuro Cristina- eres lo mejor que me sucedió y eres muy importante para mí y ahora junto a Jamiel, son mi mayor dicha. Las protegeré a ambas con mi vida.

Limpio con la palma de su mano esa pequeña humedad y se concentro en su móvil otra vez…revisó y dio con la llamada perdida que tenía desde la mañana…quedo intrigada, chequeo su buzón de voz y quedo petrificada al oír la voz que ahí se grabo…era Ignacio su hermano menor...que le avisaba que sus empresas habían sido compradas por un inversionista extranjero y le rogaba que se cuidará…pues ella era la única soltera de la familia y temía que su padre la obligase a recuperarlas con su viejo estilo de alianzas de empresas.

 Cristina quedo muda por unos momentos y dejo su mente en blanco, cuando volvió en sí, se dijo que ese ya no era de su incumbencia…ella no formaba parte de esa familia…pues todos ellos la rechazaron en forma muy cruel, excepto Ignacio que siempre busco la forma de verla a escondidas de su padre.

Aspiro fuertemente y decidió olvidarse de ello de una buena vez, ahora tenía un presente, una nueva vida y no se iba a involucrar en algo que no le atañe más…sin más escribió un mensaje para su hermano y luego guardo su móvil en su chaqueta…guardo todo lo que tenía sobre su escritorio y miro su reloj… y con una sonrisa traviesa… marco el anexo de…

-Jamiel puedes venir a mi despacho por favor- demando Cristina.
-enseguida- contesto Jamiel, asombrada de que le llamase a estas horas, golpeo suavemente antes de entrar.
-adelante- exclamo Cristina.
-¿sucede algo Cristina?- inquirió Jamiel al ver el rostro un tanto serio de la joven y no pudo evitar morderse el labio inferior al ver la forma de verle que tenía Cristina.

Por su parte Cristina le contemplo silenciosamente sin responder a su pregunta, se levanto del asiento y fue a su lado…la tomo entre sus brazos y le susurro muy cerca de su oído

-no me sucede nada- respondió Cristina- sólo quería estar con mi novia nada más y hacer esto… (Reclamo sus labios en un beso lento y sensual que le robo hasta el aliento a Jamiel, cuando al fin la libero de sus caricias junto su frente a la de su novia) me moría por besar tus labios otra vez.
-mi amada Cristina- susurro Jamiel, mientras acariciaba su rostro con mucha ternura- pensé por un momento que algo malo te sucedió.
-shisssss-la silencio Cristina- no pienses nada, ahora vente conmigo es hora de irnos a casa, de ahora en más te irás conmigo siempre, no quiero que nadie tenga ese derecho más que yo.
-Cristina- exclamo Jamiel- nadie podrá apartarme de tu lado, soy fiel amor no lo dudes nunca.
-lo sé- señalo Cristina- me basta verte para saberlo, ahora mi vida larguémonos de una buena vez.

Ambas muchachas toman sus pertenencias, se despiden de sus compañeros y se enfilan rumbo al coche de la joven Loren…pone en marcha su auto y en eso coqueta le guiña un ojo y pregunta…

-tu apartamento o el mío- dijo muy pícara Cristina para hacer sonrojar a su novia.
-el mío- repuso ella con firmeza- quiero presentarte a una persona especial para mí.
-¿especial?- exclamo la joven arqueando una ceja- Jamiel no me dirás…
-no tontita- dijo risueña Jamiel, leyéndole la mente- nada de lo que estás pensando, tú eres la única.
-eso está mejor- expuso mas repuesta Cristina- te lo advierto, no me gusta compartirte con nadie, queda claro.
-claro como el agua amor mío- dijo entre risas Jamiel al ver que su amor era un tanto celosa.
Sin más coloco su mano sobre la de la de Cristina que estaba en la palanca de cambios y apoyo su cabeza sobre su hombro…la joven Loren sonrió…ese gesto le agrado muchísimo…le estaba gustando su nueva vida de mujer comprometida…sencillamente Jamiel estaba dándole alegrías que creía ajenas y lejanas para ella…sin más se concentro en el camino…con el firme deseo de ser feliz junto a la mujer que estaba conquistando su corazón.

Mientras que en otra autopista….
Después de un largo recorrido, el automóvil de la marquesa se detuvo a las  afueras de un lujoso resort en medio de la naturaleza, comenzaba el plan para conquistar el corazón de la joven Milovic.
-Kiara- dijo Elizabeth- hemos llegado a nuestro destino (apretó suavemente sus hombros para que despertase)
-¿en dónde estamos?- inquirió Kiara
-En el The Nature & Spa Resort –comento Elizabeth- espero te agrade, ahora vamos a registrarnos
Elizabeth descendió del vehículo, luego le ofreció la mano a la joven para salir y de ese modo fueron hasta la recepción de dicho sitio.
-buenas noches- dijo el encargado- sean bienvenidas a nuestro Resort, tienen reservaciones.
-por supuesto- exclamo la marquesa- mi nombre es Elizabeth Erlington y tengo reservados dos habitaciones.
-un segundo por favor, verifico en seguida- dijo el joven, una vez que le hallo le informo- eso es correcto hay una habitación doble  a su nombre y otra para el señor James Rosler.
-Así es- respondió Elizabeth- dentro de unos minutos vendrá mi chofer, por favor atiéndalo como es debido, cualquier cosa que él necesite procúrensela, yo sabré recompensar muy bien todo ello.
-sus deseos serán acatados Señorita Erlington- repuso el joven- por lo pronto aquí tiene sus llaves, ¿deseas algún otro servicio?
-por supuesto- señalo Elizabeth- por favor que tengan preparado el Spa para nosotras y envié una botella de Champagne a nuestra habitación.
-como no- respondió el muchacho- les informare al instante, que disfruten la estancia en nuestro Resort.
-gracias- respondieron ambas.
Elizabeth tomo de la mano a kiara ...ésta se estremeció por completo ante el contacto e iba retirar su mano, pero Elizabeth lo impidió muy sutilmente hasta lograr que la joven desistiese de su acción.
-te he dado mi palabra que cuidaría de ti- expreso Elizabeth- confía en mí.
-yo…este – pronuncio dubitativa kiara
-sucede algo kiara- inquirió Elziabeth- dímelo por favor
-vera- expuso la joven- usted dijo que más adelante me iría a dejar a mi hogar y por lo visto tiene planeado quedarse esta noche en este lugar, se puede saber porqué.
-Kiara- respondió Elizabeth sonriente- tranquilízate, fui muy honesta contigo de que te iba a llevar  a casa siempre y cuando no te gustase el lugar dónde te traería, pero acabas de llegar y ya te quieres ir, por lo menos dale un chance de disfrutarlo primero y luego vemos qué hacemos si no es de tu agrado.
Kiara se avergonzó ante las palabras de su jefa, pues comprendió que había sido un tanto descortés de su parte con su comentario, sintió arder sus mejillas y clavo sus ojos hacia el piso, para que Elizabeth no viese lo ruborizada que estaba. Pero no lo consiguió pues nada paso desapercibido ante la mirada de la marquesa, la cual quedo impresionada al ver sonrojarse de ese modo a la joven, le sedujo esa faceta de kiara, tanto que su cuerpo enloqueció al instante a la reacción de su pareja….sus instintos respondían al súbito aroma que ella emitiese, aún más al estar a escasas horas  de la luna creciente, por lo que tomo a la joven y a la atrajo hacia su cuerpo y apreso sus labios con los de ella, demandando una respuesta….Kiara no pudo evitar el contacto pues ya la luna comenzaba a ejercer su poder sobre sí…ya que la marca de la luna roja estaba visible en su pecho…por lo que correspondió al beso de la marquesa y sus brazos rodearon el cuello de Elizabeth y ella rodeo su cintura apegando aún  más sus cuerpos….sus bocas se devoraban entre sí….explorando su cavidad, degustando de ella como eso fuese el elixir de la vida, sus lenguas se reconocían a través de un juego ancestral de los amantes…
Hubiesen continuado de ese  modo por mucho tiempo si no hubiesen escuchado como una voz carraspeaba en el pasillo, al separarse se toparon con un par  jovencitas que no dejaban de observarlas con cierta mirada de lujuria y a su vez incredulidad…al extremo de que una de ellas al pasar por su lado, clavo su mirada en Kiara y le miro con morbo y no conforme con ello le guiño un ojo, lo que hizo que Elizabeth  mirase enojada a la muchacha y tomo del brazo a su pareja y se la llevo consigo.
-lo siento- se disculpo la joven- no era mi intención causar  este tipo de espectáculos.
-kiara- señalo Elizabeth- no debes disculparte por lo sucedido, ambas lo quisimos y por mi parte lo disfrute mucho, ahora entremos a cambiarnos para que disfrutemos de ese Spa, te parece.
-me encantara hacerlo- exclamo la joven Milovic un tanto sonrojada- nada me vendría mejor que un buen masaje para aliviar todas las tenciones de este día, sin duda debo reconocerle que me ha sorprendido con este lugar, es hermoso, sus paisajes son espectaculares, usted tiene un muy buen gusto en sus elecciones.
Elizabeth le contemplo y sin que kiara se diera cuenta apretó  uno de sus puños, pues estaba al límite de sus fuerzas y resistencia, se le hacía difícil contenerse al verla sonrojarse una vez más, era demasiada tentación en esos instantes, por lo que procuro salir del paso tratando de mantener una rápida conversación:
-me alegra oírte decir eso- contesto Elizabeth- eso es un avance de lo que vendrá esta noche, te aseguro que lo disfrutarás, por cierto Kiara, sólo por esta noche no me  trates de usted, llámame  Elizabeth simplemente, no me  voy a enojar porque lo hagas, estamos en confianza y en una tregua, qué me dices.
Kiara no supo que decir ante el comentario, definitivamente este no era su día, su jefa estaba avasallando con ella y no podía responderle como solía hacerlo, sólo atino a morderse un poco el labio inferior por el nerviosismo que se estaba apoderando de ella.  Por otro lado Elizabeth con ese simple acto tembló como hoja al viento, ya que toco fondo en sus fuerzas y se rompió todo dentro de su ser, pues los instintos salvajes la dominaban como nunca antes, sus ojos se oscurecieron por el deseo, el aroma de su pareja en celo la enceguecieron a tal punto de soltar un gruñido y como pudo se la arreglo para tomar de la mano  a kiara y la llevo en un santiamén a su habitación, haciéndola pasar y dejar sus cosas sobre el mostrador de la alcoba y sin decir palabra se dirigió al baño para tomar una ducha fría y calmarse antes de cometer una locura pues estaba decidida esperar hasta mañana por kiara costara lo que costará. Permaneció por 20 minutos hasta que logro aplacar su cuerpo y una vez  listo seco su cuerpo y salió del lugar envuelta en una bata…al ingresar a la habitación se topo de frente con los ojos miel de Kiara que le miraban un tanto preocupada.
-¿está usted bien?- inquirió dudosa la joven- me dio la impresión que no sentía bien.
“si supieras que eres la causante que en mi cuerpo se desate este tipo de deseo y ferocidad por un simple acto tuyo,  no estarías aquí, debe ser más que seguro que la luna ha comenzado a influenciar entre nosotras dos por estar cercana su hora, pues no podre contenerme mucho más si continuas desprendiendo ese aroma que de ti está emanando” meditaba la marquesa mientras contemplaba a la joven.
-estoy bien kiara- encubrió Elizabeth con sus palabras- pero tú aún no estás lista para que vayamos al Spa, dime no quieres ir ahora.
-por supuesto que deseo ir- exclamo Kiara- deme unos segundos y estoy con usted.
-de acuerdo – respondió Elizabeth- pero no  demores tanto.
-no la hare- contesto la joven y se perdió en el baño, tomo una ducha breve de 10 minutos y salió, envuelta en una bata y su cabello cubierto por una toalla, al quitársela dejo caer su cabello en una cascada haciéndola lucir muy sensual, por lo que capto rápidamente la atención de Elizabeth, quién se levanto de su cama y le ayudo a secar su cabello, acariciando delicadamente a la joven con sus actos, de improviso la giro y clavo su mirada en la joven, no cabía duda de lo que vio en sus ojos, kiara estaba despertando sexualmente al hechizo de la luna, por lo que tomo el mentón de la joven y le arrebato un beso breve, al momento de apartarse le obsequio una seductora sonrisa.
-vámonos ya- ordeno Elizabeth y tomo nuevamente de la mano a la joven y se dirigieron hasta llegar al Spa, muchos curiosos le veían y chismeaban al ver entrelazadas sus manos, pero ninguna de las dos les prestó atención, cuando entraron a dicho lugar, les recibió dos muchachas, entonces se separaron y cada una fue atendida por las masajistas, quienes la condujeron hasta sus respectivas camas y procedieron a relajarse….
Elizabeth disfruto al máximo el masaje, pues le servía de terapia y así olvidarse por unos instantes del intenso llamado que le estaba haciendo su pareja producto de la proximidad de la luna. A pesar de todo, Elizabeth era humana y no podía evitar sentirse vulnerable al lado de Kiara, por lo que decidió sumergirse totalmente a la relajación que muy pronto quedo inconsciente por un tiempo y uno fue hasta que volvió en sí que se percato que el aroma de su amada no estaba inmerso  en el aire y abrió sus ojos de golpe, buscándola rápidamente con los ojos y se alarmo al ver vacía su camilla y no sólo eso ninguna de las asistentes se encontraba en el lugar y miro el reloj de pared del lugar y descubrió que estuvo dormida por dos horas, tiempo suficiente para que Kiara le abandonase, ese sólo pensamiento le hizo estremecer, se  arropo nuevamente con su bata y fue en su busca.
-kiara, por favor- clamaba Elizabeth dentro de sí- cómo pude ser tan idiota de dejarte de ese modo, todo por acallar mis instintos termine  abandonándote, por favor que no se haya ido. Elizabeth apresuro el paso y se fue rumbo a su habitación, al llegar al lugar su ropa no estaba y esto hizo que se pusiera más tensa, como pudo se vistió y fue en busca de James…le encontró en uno de las salas de juego con un señor en pleno partido de ajedrez….al ver a su señora James fue a su encuentro…
-¿sucede algo mi señora?- inquirió éste-le noto muy alterada.
-James- pregunto preocupada Elizabeth- has visto a Kiara
- no mi señora- respondió él- tampoco le he visto salir, ya que desde aquí tengo amplia vista de quién sale y entra, además que estoy muy consciente que la amiga de la señorita kiara puede venir por ella en cualquier momento y voy a cumplir mi promesa que le hiciera antes, no dejaré que nadie le aparte de su futura esposa.
-gracias James- contesto Elizabeth- eso quiere decir que ella no ha abandonado el Resort, pero dónde puede estar.
-mi señora si me permite- señalo james- use sus instintos de lobo para hallarle, no puede  escapar de usted si está cerca, hágame caso.
-tienes razón James- acoto Elizabeth- eso mismo haré. Cerró sus ojos, tranquilizo su mente y abrió sus instintos olfatorios y sensoriales, rastreando el aroma de la joven, percibió miles de fragancias hasta que de súbito su nariz capto ese aroma tanto propio de la joven y abrió sus ojos- te tengo kiara- dijo resuelta Elizabeth- gracias James, vuelve a tus asuntos y descansa esta noche.
-eso hare mi señora- repondió él- buenas noches.
-buenas noches James- se despido la marquesa- voy por ti, esta vez no te dejare, tendrás toda mi atención, voy consentirte como jamás nadie lo ha hecho.
En otro sitio del Resort…
Una joven sentada en la barra no deja de meditar en todo lo sucedido en este día, mientras bebe su coktail…miles de pensamientos cruzan por su mente…su amiga Cristina y su confesión de amor….su jefa y todas las emociones que se despertaron dentro de ella….las emociones de molestia que tuvo hace unos momentos atrás al verla como coqueteaba con la masajista….su indignación al ver como perdía la conciencia y era motivo de una caricias extrañas por parte de la joven del personal, como si ya conociese a Elizabeth….definitivamente kiara necesitaba largarse del lugar…todo esto era muy confuso y ya se estaba volviendo molesto al recordar cosas olvidadas…de súbito unos brazos le apartaron de su vaso y molesta se volteo a encararle… y mayúscula fue su sorpresa al toparse con el rostro incrédulo de Elizabeth.
-creo que es suficiente de alcohol para ti- señalo Elizabeth- te dejo sola por unos momentos y te refugias aquí.
-vaya- señalo la joven- da igual señorita Erlington, por mi puede volver a sus entretenimientos, por eso la deje sola para no importunarla, yo regresaré más tarde a la habitación, así que no lo quito más tiempo.
Elizabeth no daba crédito a las palabras de la joven, pues por su tono estaba molesta, es más se atrevería a decir que kiara estaba celosa y recordó por qué, cuando estaban en el Spa sintió por unos momentos la mirada clavada de kiara cuando platicaba a gusto con la masajista, pues ella siempre la atendía y era lógico que tuviese ese tipo de platicas con la joven, pero jamás osaría tener nada íntimo con ella, menos estando su pareja en el mismo sitio, pues desde que Durían le advirtió de su existencia, Elizabeth no tenía ojos para nadie más, de hecho se habían terminado todos su encuentros casuales de antes y para ella en su vida sólo existía kiara y nadie más.
-todo lo contrario Kiara- comento Elizabeth- tú te vienes conmigo y déjame aclararte que no me quitas mi tiempo y tampoco mantengo ningún de relación con la joven del Spa, no estoy interesada en nadie que no seas tú, ha quedado claro- Elizabeth volviéndose al barman-  tenga la bondad de anotar todo el consumo en mi cuenta.
-como no señorita Erlington- contesto el joven.
- ahora vamos, quiero que disfrutes del jacuzzi- señalo la marquesa y tomo del brazo  a la joven y no se detuvo hasta llegar a su habitación, una vez allí llevo a la joven hasta la sala de baños e hizo que se despojara de su ropa y se introdujese al jacuzzi, mientras ella iba   por algunas cosas dentro de la habitación…momentos después Elizabeth regresaba envuelta en su bata y en sus manos traía una botella de champagne y dos copas….las dejos en el borde y procedió a desatar el lazo de su bata y deslizar esta hasta  dejarla caer…quedando completamente desnuda ante los ojos miel…Elizabeth sonrió muy complacida al ver presente el deseo en ellos… y muy lentamente se introdujo en el jacuzzi…tomo la botella y sirvió ambas copas…le entrego una a kiara y tomo la otra para sí…
-brindemos por nosotras, mi querida kiara- dijo muy seductoramente Elizabeth- porque esta noche sea inolvidable para ambas.
La joven estaba sumergida en esos ojos verdes…realmente este día estaba hechizada por todo lo que hiciese Elziabeth Erlington…no tenía idea en qué terminaría todo eso…pero ya no le quedaban fuerzas para seguir oponiéndose a lo inevitable…por lo que atino a estrellar su copa con la de Elizabeth y beber del líquido burbujeante y sin apartar sus ojos del rostro de su jefa…realmente la joven Milovic comenzaba a sentir los estragos de la sensualidad de la marquesa de Cronwell…
Comenzaba así el preludio de la luna creciente dónde las dos hijas de la luna sellarían sus promesas ante su madre en la ceremonia más antigua de su mundo el ritual del enlance.